Sin miedo, comenzó a cruzar El Puente pues Santiago Nasar estaba esperando del otro lado. Al llegar frente a él y después de mirarse a los ojos por unos instantes sin tiempo ya, se fundieron en un profundo abrazo. Bienvenido, te estábamos esperando le dijo, mientras pasaba cariñosamente el brazo por encima de sus hombros, y comenzando a caminar, dieron definitivamente la espalda al Otro Lado.

De pronto, de entre una nube de polvo e inmenso ruido, aparecieron ante ellos los diecisiete hermanos Aurelianos con su padre, el coronel Aureliano Buendía, al frente.

¡Aureliano¡, exclamó Gabo entre risas, el hielo aquí…  ¿también quema?

Gabriel García Márquez

Inventor de Mundos. Maestro. Hace un año, cruzó El Puente.